Una vez que tenemos el producto definido. Hemos estimado un precio que nos hace competitivos. Establecido los canales de distribución y los plazos. Las estrategias de marketing que llevaremos a cabo para la venta por Internet. Ha llegado el momento de ponerlo todo sobre la mesa y establecer el plan financiero para nuestra tienda online, que nos permitirá saber cuanto debemos vender para que nuestro e-commerce sea rentable.
Pasos a seguir para realizar un plan económico para un e-commerce
Es normal que al principio de crear el negocio online nos encontremos con algunos conceptos que nos son desconocidos o que no tengamos clara la inversión que requiere el lanzamiento de un eccomerce. Por eso empezaremos por analizar los gastos fijos y variables y la inversión necesaria para una tienda online que nos permitirá prever las necesidades de financiación y tesorería.
Si quieres saber qué beneficios te aporta preparar un plan económico para tu tienda online no te pierdas nuestro artículo «Beneficios de tener un plan económico para mi e-commerce»
Paso uno: Inversión, gastos fijos y variables:
- Costes de establecimiento: gastos fijos que se generaran con independencia del volumen de trabajo. Alquiler de local, oficinas o almacén, teléfono, internet, luz, agua, calefacción, material de oficina…
- Costes de aprovisionamiento: los incluiremos en función del catálogo de productos o servicios que vendamos. Materias primas, productos acabados o semiacabados y packaging
- Recursos humanos: son los gastos derivados de la contratación y gestión de personal
- Marketing digital: incluirá la inversión necesaria en publicidad, links, mailing adwords, SEO o SEM.
- Mantenimiento online: son los gastos derivados directamente del e-commerce. En esta categoría incluiríamos, el hosting o alojamiento, el dominio, la plataforma de venta. Tambien el coste del diseño de la web o de las pasarelas de pago.
- Gastos jurídicos legales y mercantiles: son los gastos inherentes a cualquier actividad empresarial. Autónomos, IRPF, IVA y otros impuestos o gastos de gestoría y asesoramiento fiscal y contable.
Paso dos: Origen de la financiación
En esta apartado definiremos el origen de los fondos necesarios para la inversión inicial. Ya sean fondos propios, subvenciones o donaciones o financiación bancaria, en cuyo caso debemos tener en cuenta que también conllevará un coste que debe quedar reflejado en el paso uno.
Paso tres: Cálculo de los ingresos previstos
El estudio de las cuotas de mercado de nuestros competidores nos puede dar una idea de las ventas previstas. Para ello debemos equiparamos con aquellos que por inversión sean más similares a nuestro e-commerce.
En los e-commerce pocos datos tienen tanta relevancia para la estimación de ventas como la tasa de conversión, es decir, el porcentaje de las personas que nos visitan que llegan al final del proceso de compra.
Debemos tener en cuenta que esta tasa será menor al inicio de la actividad y que irá aumentando a medida que ganemos visibilidad en Internet. Por supuesto que con independencia de cuál sea nuestra tasa de conversión, a mayor número de visitas mayor numero de ventas, de ahí la importancia de contar con un buen posicionamiento.
Paso cuatro: Resultado provisional
Una vez evaluados y registrados todos los gastos e ingresos necesarios, así como, la forma en que se obtendrá el capital y el plazo para llevar el proyecto a cabo, podremos obtener el punto de equilibrio y encontrarnos con varios escenarios
- E-commerce no viable: porque estimamos que no podremos llegar al número de ventas necesarias para obtener rentabilidad. O quizá no obtenemos el capital necesario para la inversión inicial.
- E-commerce viable: existen dos posibilidades
- Viabilidad económica. El proyecto es viable en términos económicos. Existe la posibilidad de vender el producto a un precio mayor que su coste obteniendo beneficios.
- Viabilidad financiera. Además de existir una viabilidad económica el negocio online tiene la capacidad de asumir los costes a corto medio y largo plazo