La logística es uno de los procesos clave en muchas empresas de hoy en día. Además, con la proliferación de los e-commerces, donde los usuarios exigen cada vez más las entregas 24/7, este proceso adquiere gran relevancia. De él va a depender que los plazos de entrega sean cada vez menores, que se reduzca el precio de venta del producto final y que, en definitiva, se abaraten los costes del proceso de producción y, por ende, se obtenga mayor rentabilidad.
Dos conceptos esenciales dentro de la logística del e-commerce son el picking y el packing. Pero, ¿qué es el picking y el packing?
¿Qué es el picking?
El picking, que traducido al castellano significaría recogida o recolección, se trata de la preparación de un pedido. El picking es el proceso a través del cual se deja listo el pedido, conllevando ello la coordinación y recogida del pedido desde pasillos, estantes, palets o sistemas informáticos hasta su destino, con el objetivo de mejorar y reducir tiempos, espacios y eficiencia en la calidad del servicio.
Pese a la poca importancia que muchos empresarios podían darle a este proceso de preparación del pedido, resulta una pieza clave. Gracias a su coordinación y gestión estructurada, el picking va a permitir reducir costes de una manera increíble y, sobretodo, lo que es más importante, reducir tiempos considerablemente, lo cual repercutirá de manera directa y muy positivamente sobre el servicio que se le da al cliente final.
A través del picking, seremos capaces de detectar las oportunidades que permitan aumentar la eficiencia en función de la actividad del e-commerce o la tipología de productos que manejemos, por ejemplo.
Algunos de los beneficios del picking son: evitar combinar referencias en la misma ubicación, reducción del tiempo de tránsito de los ítems, selección del soporte de almacenamiento adecuado e idóneo, definición de sistemas de recobida y planificación de entrada y salida de materias, etc.
¿Qué es el packing?
Por su parte, el packing significa en castellano, empaquetar. Por tanto, el proceso del packing engloba al producto, su empaquetamiento, embalaje y envase. El packing está obviamente muy relacionado con el proceso del picking, y variará mucho en función de si hablamos de productos perecederos (como carne o pescado) o no perecederos (por ejemplo, bolígrafos).
Asimismo, el packing implica también la preparación del pedido para su entrega final al cliente, es decir, el cómo esté presentado y lo que será la carta de presentación, por lo que se trata de un proceso muy importante y del que hay que vigilar cada mínimo detalle, tratando de dar una buena imagen de marca y satisfacer a nuestros clientes y superar sus expectativas.
Además, debes conocer también lo que se conoce como el packing list, es decir, la lista de contenidos del paquete, explicando qué contiene la caja y cantidades de los respectivos productos del envío. Igualmente, el packing list contiene información sobre la factura. Se trata de un documento obligatorio que facilitará también la identificación de los envíos en las aduanas y sirve también como comprobante en la llegada de los almacenes de los clientes y, en caso de producirse alguna pérdida o daño, servirá para su reclamación.
En definitiva, el picking y el packing son dos conceptos básicos en lo que respecta al almacenaje y preparación de mercancías para su envío y entrega al cliente final. Es muy importante que como empresario cuides y controles esta fase del proceso, puesto que es mucho el porcentaje de reducción de costes que puedes ahorrarte, simplemente por realizar una buena coordinación y gestión de los productos.