En cualquier negocio, es fundamental no quedarse anclado ni estancado, debiendo apostar por la mejora continua.
Para ello, una de la base para mejorar y optimizar nuestro negocio es el apostar por la analítica para e-commerce. Se trata de un tipo de negocio que, actualmente, está de moda. Sin embargo, para sobrevivir a la competencia y destacar nuestros productos y servicios sobre el resto, debemos dar un paso más allá y conocer al detalle cada paso que los usuarios dan en nuestra web. Es increíble la cantidad de información y de conclusiones que podemos extraer; sin embargo, si no la parametrizamos, estamos perdiendo un gran valor.
Un punto muy importante de la analítica para e-commerce es ser capaces de conocer qué sitios logran ver nuestros usuarios, qué zonas llaman la atención de éstos. Descubre qué son los mapas de calor en el e-commerce.
Heatmaps en el análisis de un e-commerce
Los mapas de calor, también conocidos en inglés como heatmaps, se trata de gráficos que nos permiten identificar los puntos calientes de nuestra web. ¿Que quiere decir esto? Que nos permite detectar las zonas de nuestra web en la que se concentra la atención de los visitantes de nuestro e-commerce y, por tanto, como es lógico, los puntos donde se favorece la conversión (ya sea por compra, descarga o suscripción, por ejemplo).
Los mapas de calor presentan la información de manera muy gráfica, utilizando una termografía, donde las zonas de acción de clics se muestran en colores cálidos; mientras que las zonas que no reciben atención, se muestran en colores fríos (azul, verde).
A la hora de diseñar nuestro e-commerce muchas veces caemos en el error de crear los contenidos y diseños según nos guste a nosotros, sin pensar en la usabilidad y en cómo el usuario recibirá la información. Al final, de lo que se trata es de poner las cosas fáciles e intuitivas al cliente, por lo que debemos analizar muy bien cada punto “caliente” de nuestra tienda online, de manera que vayamos guiando al usuario hacia las zonas que más nos interesan. Para ello, son realmente útiles los mapas de calor.
Los mapas de calor sirven para detectar cuáles son las zonas donde más atención presta el usuario. Así, de manera muy gráfica y visual, un mapa de calor o heatmap muestra en una termografía las zonas de los clicks en dos gamas de colores diferentes. Existen diferentes tipos de mapas de calor que podemos usar en el e-commerce y todos ellos usan la siguiente escala de colores:
- Colores fríos (azul, verde). Se emplean para indicar las zonas donde el usuario apenas hace clic, lo que se traduce en que son zonas donde el usuario no presta atención.
- Colores cálidos (rojo, naranja y amarillo). Estos colores se emplean para las zonas donde se producen más clics y, por tanteo, hay un foco mayor de interés.
Te contamos para qué sirven los mapas de calor en el análisis de un e-commerce:
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- Análisis del proceso de conversión. Los mapas de calor te van a ayudar a detectar si existen problemas en alguna de las fases de conversión, pudiendo solucionarlo de manera casi inmediata. Por ejemplo, puede darse el caso de que haya algún problema en un paso del proceso de compra.
- Verificar CTAs (Call to actions). Las Call to actions son llamadas a que el usuario haga una acción específica, como por ejemplo: “Compra ahora”. El mapa de calor te ayudará a detectar si el usuario efectivamente hace o no clic.
- Comprobar la efectividad de los elementos de información. En una web tenemos infinidad de elementos y es importante saber cuáles son o no útiles para el usuario. Quizá en el menú haya una categoría que es trascendente y que puede sustituirse por otra que sea de mayor interés para el usuario.